Entradas

Mostrando entradas de enero, 2023

ANTONIO DI BENEDETTO. Elegía a la espera

Zama posee un discurso lento, con recovecos necesario para que las secuencias sucedan. En Zama todo fluye en un derrame continuo, una frecuencia que hiere. El Gobernador iere escapar, el lector lucha con una escritura “red” que lo atrapa. Los finales en Di Benedetto se anticipan; están advertidos desde las primeras palabras. Igual sorprenden porque la lengua en Zama, la letra de la carta que concede el permiso, es potente. Zama resulta una novela de la autorización imposible: una concesión que se demora para ser trama. Di Benedetto enseña a escribir a través de lo que se detiene. Todo transcurre por detrás de la autorización para que Zama logre el traslado a lo largo del territorio del Virreinato; quiere alejarse del peligro, del enemigo siempre al acecho. Imposible. Di Benedetto recurrió a la novela para apiadarse del exilio y honrar la lucha de aquellos que buscan justicia, aunque sea bajo la metáfora de un permiso escrito. Se debe leer Zama con los ojos de quienes todavía piensan qu...

POLLERA

Se apuró a almorzar. Hasta ayudó con los platos. Le habían prometido ir de compras. Ya había visto la pollera con su tía. Secó el último plato con el repasador húmedo. No había tiempo que perder. Se sentó en su cama. Esperó el timbre con la visita de la tía Clara. La iba a abrazar y contarle al oído lo del saquito haciendo juego con la pollera verde manzana. Entornó la puerta de su dormitorio para poder ver la frutera llena del color que quería. Se restregaba las manos. Pensó desde su puesto en el mantel blanco y el color del saquito tejido. Se lo iba a poner para salir a pasear con Elena; esa vuelta por la plaza, y el perfume que de a poco le sacaba a su madre. Le habían enseñado a ser obediente y, lo que era importante, no pedir mucho. Su madre la había aturdido con preguntas. Seguro que te prometió ropa, le dijo varias veces con tal de asegurarse de que no todo había sido antojo. Nunca iba a conformar a su madre. Su tía no venía. Ella hacía rato de que la espera le quemaba los pies ...

ENFERMOS

 Kingdom Exodus. Lars Von Trier. Dinamarca. 2022 La genialidad muchas veces es producto de saber agrupar  con inteligencia esperpentos disfrazados de humanos. Von Trier construye “personajes” paródicos sin piedad. Ellos deambulan por un Centro Médico sin una meta clara, salvo de toparse entre ellos en una trama que oscila entre el horror y lo diabólico. La salud exige un cuidado imposible; el hombre y la mujer estigmatízalos tras un delantal, una camilla y tubos de oxígeno ceden a sus arrebatos y la “cura” nunca tiene remedio. Así como  Shelley ideó aparatejos, alambiques con líquidos oscuros para idear un humano que soportara la vida, Trier busca en El Reino satirizar una comunidad médica. Ideó criaturas sin escrúpulos. Los especialistas no revisan y los pacientes asumen su triste condición masoquista de entregarse a la voluntad de un “saber” siempre cuestionado. No hay piedad; el profesional solo sufre la irracionalidad propia.

EL FINAL

Anéantir. Aniquilación. Michel Houellebecq. Anagrama. 2022. El hombre busca de manera inevitable su destrucción. Este tópico es recurrente en Houellebecq. Aniquilación construye una gran figura metonímica en la que el individuo se deteriora a la par de todo lo que elabora para salvarse: la carrera política, las guerras, los atentados. No hay cielo, ni Edad de Hierro y de Oro tan afín a la de los antiguos. Pero no todo es pasividad o entrega resignada como espíritu sacrificial: existe un aferrarse a la vida, un acto que no es entretenimiento o fuga; es la pasión por una “soledad” legítima que solo permite, como paradoja, una compañía en el momento final. Es en ese terminus ad quem en donde Houellebecq recurre a lo bucólico como los pastores de Virgilio. A la muerte solo la asiste la naturaleza y la compañía de los estertores del deseo. Ese es Houellebecq: un ave fénix que surge en medio del derrumbe de la sociedad, del dolor, para advertir de algo nuevo. La misma conjetura de Nietzsche ...

PATERNIDAD

 Aftersun. Charlotte Wells. Reino Unido. 2022. Los momentos de vacaciones entre un padre y su hija preadolescente pueden llegar a convertirse en un relato íntimo y confidente. Hay preguntas que los padres siempre esquivamos, hacemos rodeos para evitar que nos expongan. Los hijos siempre nos indagan. No les hacen falta palabras, les alcanza con la vista para comprobar lo que sospechan. Aftersun es el “reconocimiento” de una historia de filiación. Los protagonistas inician un camino para mostrarse tal cual son: dos seres que se buscan en unas vacaciones que los obligan a “desnudar” su vida. Muy pocas veces los padres damos cuenta del hecho de la condición de padres. Aftersun es aguda sin caer en lo irremediable de la culpa; es un relato iniciático: el padre rebobina su vida y la de su hija y ella, intenta rellenar los espacios vacíos de la vida con su padre. A los dos los preocupan los sucesos incompletos, intercalados que transcurrimos como vida. La maestría de Wells consiste en rec...